Es que me conocen. No sé cómo lo hacen, pero me conocen.
No hago más que recibir correos que dicen: "Miguel, you can lose weight while you sleep". ¿Cómo han averiguado que he engordado tanto? Vale, no hay más que verme pero ¿porqué me recomiendan un método para perder peso mientras duermo? ¿cómo han sabido que no pienso hacer dieta?
Y los del Viagra. Vamos, hombre. Yo pensaba que era una cosa entre mi mujer y yo. Que no se me levanta. Pues estos listos lo han adivinado de nuevo (porque yo confío en la discrección de mi señora, eh).
Los que han fallado, esos si, son los que me ofrecen sitios porno. Porque yo soy muy tradicional y esas cosas: sexo anal, violaciones brutales... una guarrada. El otro día entré en uno, que era gratis, pero me pidieron los datos de la VISA y bueno, tenía curiosidad así que se los dí. Pero no me cobraron nada, eh, era gratis. Y había unas fotos muy raras. Había unas con... ANIMALES... ya digo, una guarrada.
Los hay que me ofrecen ganar dinero: seguro que han accedido a mis cuentas bancarias, saben que no llego a final de mes. Pero ¿porqué quieren ayudarme? ¿a qué viene semejante interés en mi persona? ¿a cambio de mi riñón izquierdo?
Yo no sé vosotros, pero a mí esto de la Red me da mucho miedo. Me parece que ya estamos en 1984. El gran hermano nos vigila.